Resumen: El 'controller' es el
responsable de elaborar los presupuestos de la empresa y compararlos con el
día a día del negocio. Después de analizar por qué se producen las
desviaciones, aconseja a la dirección en la toma de decisiones. Además de
dominar la contabilidad, este profesional, que suele ser licenciado en
Económicas o en Administración y Dirección de Empresas y con tres o cuatro
años de experiencia, debe tener capacidad analítica, estratégica y una
visión global de la compañía.
___
Juan Fajardo/ Madrid.
Para que una empresa pueda cumplir sus
objetivos, la dirección debe conocer mensualmente cómo marcha el negocio. El
controller es el profesional encargado de facilitar esta información al
directivo. Tras elaborar los presupuestos, el controller vigila si se
producen desviaciones respecto a los objetivos marcados y analiza los
motivos por los que se han producido.
Luego, asesora a la dirección general y a las
diferentes unidades del negocio sobre qué medidas correctoras llevar a cabo.
"Aunque el controller no toma decisiones, la participación activa en los
planes de mejora del negocio asesorando a los máximos responsables de la
empresa lo han convertido en un puesto muy atractivo y demandado", explica
Fermín González, coordinador de zona para el área financiera de Ajilon.
Los controller suelen ser licenciados en Económicas o en Administración y
Dirección de Empresas y tener tres o cuatro años de experiencia en auditoría,
de analista de empresas en entidades bancarias o en departamentos
financieros, realizando análisis de ratios, costes, balances, cuenta de
resultados... Además de dominar la contabilidad y la informática, este
profesional debe, por un lado, tener capacidad analítica para interpretar
los datos, prever situaciones y sacar conclusiones y, por otro, conocer bien
la compañía y el negocio para poder proponer ideas y soluciones.
"En BBVA buscamos perfiles polivalentes y con experiencia de 3 ó 4 años como
analista o en áreas financieras, de tesorería o de control de gestión en
grandes empresas", explica Luis Sánchez Navarrete, subdirector general del
banco.
Para poder desarrollar su trabajo diario, es importante que sepa manejar
hojas de cálculo, los paquetes ofimáticos básicos y algún programa de
gestión. El más utilizado es el SAP. Los responsables de selección también
valoran la realización de un MBA –para tener una visión global– o un máster
especializado en finanzas y control de gestión.
"Es importante que el controller sea un buen comunicador y sepa trabajar en
equipo, ya que como no manda, sino que asesora, tiene que saber convencer",
resalta Francisco López, director del área financiera del Instituto de
Empresa. "Debido a la repercusión de su trabajo en la toma de decisiones,
para bien o para mal, es imprescindible que sea una persona de confianza",
añade.
Respecto a las competencias, para este puesto se valora que el candidato sea
ordenado, metódico, que tenga capacidad de integración y síntesis de
información a partir de numerosas fuentes e iniciativa. "No basta con
analizar los datos, el controller tiene que mojarse, plantear soluciones y
dar su opinión", resalta González.
Aunque en muchas empresas el controller depende del director financiero, los
expertos recomiendan que tenga independencia y pueda reportar directamente
al director general, siendo su assistant o mano derecha.
Los siguientes pasos en la carrera de este profesional suelen ser la
dirección financiera o la dirección general, aunque también pueden ocupar
puestos de responsabilidad en otras áreas de la compañía debido a la visión
global que tiene. "Lo ideal es que estén cuatro o cinco años en el puesto y
después salten a otras áreas en las que hayan desarrollado este trabajo:
financieras, inmobiliaria, fondos, seguros...", concluye Sánchez Navarrete.